Atentado contra Donald Trump
El 13 de julio de 2024, durante un mitin en Butler, Pensilvania, el expresidente Donald Trump sufrió un intento de asesinato. Thomas Matthew Crooks, un joven de 20 años, disparó desde una posición elevada, hiriendo a Trump en la oreja derecha. Este dramático evento no solo subraya la valentía del Servicio Secreto, sino también sus fallas en la protección de uno de los líderes más controvertidos de Estados Unidos.
Que es el servicio secreto?
Los primeros colonos estadounidenses usaban moneda inglesa, española y francesa mientras estaban bajo el gobierno inglés.
Sin embargo, en 1775cuando la Guerra de la Independencia era inminente, el Congreso Continental autorizó la emisión de moneda para financiar el conflicto.
Paul Revere hizo las primeras placas para esta “moneda continental”. Estos billetes eran canjeables por reales españoles. La devaluación de esta moneda dio lugar a la expresión “no vale un continental”.
Después de que la Constitución de Estados Unidos fue ratificada, el congreso aprobó la “Ley de la Moneda” el 2 de abril de 1792, que estableció el sistema de acuñación del dólar como la principal unidad monetaria.
Con esta ley se convirtieron en el primer país del mundo en adoptar el sistema monetario decimal. Las primeras monedas fueron acuñadas en 1793 en la Casa de la Moneda de Filadelfia y se entregaron a Martha Washington.
Durante los años 1793 y el año de 1861, se permitió que aproximadamente 1.600 bancos privados imprimieran su propio papel moneda conforme a los reglamentos estatales.
Con el inicio de la Guerra Civil, el gobierno desesperado por disponer de dinero aprobó la Ley del 17 de julio de 1861, que permitía que el Departamento del Tesoro imprimiera y pusiera en circulación papel moneda.
El primer papel moneda emitido por el gobierno eran “pagarés a la vista” comúnmente conocidos como “billetes verdes”. En 1862, el Congreso retiró los pagarés a la vista y comenzó a emitir billetes de Estados Unidos también llamados billetes de curso legal.
Al final de la Guerra Civil, casi un tercio de toda la moneda en circulación era falsa. Como resultado, la estabilidad financiera del país estaba en peligro.
Después del asesinato del presidente McKinley en 1901, el Servicio Secreto recibió la tarea de proteger a tiempo completo al presidente de los Estados Unidos.
Con el tiempo, esta misión de protección se ha ampliado a su cónyuge y familiares directos como nietos, abuelos y padres, pero fue sólo después 1964 cuando comenzaron también a proteger a los ex presidentes, cónyuges e hijos hasta los 16 años, protegiendo también a los candidatos mejor posicionados en la carrera presidencial.
El servicio secreto trabaja en coordinación con las fuerzas policiales, servicios locales y otros servicios federales de seguridad que en conjunto establecen lo que se llama de perímetro multinivel de seguridad compuesta de múltiples capas.
El servicio secreto es responsable de dos capas con la principal que es la protección personal del presidente, ex presidente o candidato.
La División Uniformada del Servicio Secreto de los Estados Unidos protege el complejo de la Casa Blanca y el Observatorio Naval.
Desde 1970, la División Uniformada también ha sido responsable de proteger las embajadas y consulados extranjeros en el área de Washington, D.C. y sus alrededores.
La expansión más reciente de la misión de protección del Servicio Secreto ocurrió el 20 de mayo de 1998 con la emisión de la Directiva de Decisión Presidencial 62, que estableció al Servicio Secreto como la agencia federal líder para coordinar el desarrollo e implementación de planes de seguridad para Eventos Nacionales de Seguridad Especial.
Desde entonces se han incluido las principales convenciones de partidos políticos, las inauguraciones presidenciales, cumbres de líderes mundiales, reuniones de organizaciones internacionales como la Asamblea General de las Naciones Unidas, grandes eventos deportivos nacionales e internacionales, discursos sobre el Estado de la Unión, funerales de Estado y otros eventos de importancia nacional.
Desde su fundación en 1865, el Servicio Secreto ha sido la vanguardia de la protección presidencial. A raíz del asesinato del presidente William McKinley en 1901, la agencia expandió sus responsabilidades para incluir la protección del presidente, el vicepresidente, expresidentes y candidatos presidenciales . A lo largo de los años, han desarrollado protocolos rigurosos y tecnología avanzada para enfrentar las amenazas modernas.
El Ataque en Butler: ¿Qué Salió Mal?
El incidente en Butler revela brechas significativas en la seguridad. A pesar de la meticulosa planificación y los procedimientos establecidos, Crooks logró posicionarse en un lugar estratégico para llevar a cabo su ataque. Esto plantea preguntas cruciales sobre la efectividad de los controles de acceso y la vigilancia del entorno.
- Posicionamiento del Atacante: Crooks disparó desde una ubicación elevada, lo que indica una falla en la vigilancia perimetral. Este tipo de amenaza debería haber sido anticipada y neutralizada antes de que pudiera materializarse.
- Tiempo de Respuesta: Aunque el Servicio Secreto respondió rápidamente, el hecho de que el atacante pudiera disparar su arma muestra una brecha en la detección temprana y neutralización de amenazas.
- Colaboración con Autoridades Locales: Si bien hubo cooperación, el incidente subraya la necesidad de mejorar la coordinación y la comunicación con las fuerzas del orden locales para asegurar una cobertura completa del área.
Reflexiones y Aprendizajes
El Servicio Secreto debe analizar este incidente para aprender y adaptarse. Las amenazas evolucionan, y la protección de líderes públicos requiere una constante actualización de tácticas y tecnologías. Además, es esencial reforzar la capacitación continua de los agentes para enfrentar situaciones inesperadas y mejorar la detección temprana de amenazas potenciales.
Mirando Hacia Adelante
El intento de asesinato de Donald Trump es un recordatorio poderoso de los peligros inherentes a la vida pública y de la importancia de la labor del Servicio Secreto. Para evitar futuros fallos, es crucial que la agencia reevalúe sus estrategias de protección, fortalezca la vigilancia perimetral y mejore la colaboración con las autoridades locales. La protección de nuestros líderes y la seguridad de la nación dependen de su capacidad para aprender de estos incidentes y adaptarse a un panorama de amenazas en constante cambio.
Antes del atentado contra Donald Trump, hubo múltiples casos de violencia política contra presidentes, ex presidentes y candidatos presidenciales de los principales partidos de Estados Unidos.
Lincoln fue el primer presidente estadounidense en ser asesinado, y murió a manos de John Wilkes Booth el 14 de abril de 1865, mientras él y su esposa, Mary Todd Lincoln, asistían a una función especial de la comedia “Our American Cousin” en el Teatro Ford de Washington.
James Garfield fue el segundo presidente de Estados Unidos en ser asesinado, lo que ocurrió seis meses después de tomar posesión. El 2 de julio de mil ochocientos ochenta y uno pasaba por una estación de tren en Washington para tomar un tren a Nueva Inglaterra cuando Charles Guiteau le disparó.
El tercer presidente fue WILLIAM McKINLEY, baleado tras pronunciar un discurso en Buffalo, Nueva York, el 6 de septiembre de mil novecientos uno. Estaba estrechando la mano de la gente que pasaba por una línea de recepción cuando un hombre le disparó dos veces en el pecho a quemarropa.
JOHN KENNEDY fue baleado por un hombre armado con un rifle de alto poder mientras visitaba Dallas en noviembre de 1963 junto con la primera dama Jacqueline Kennedy. Los disparos sonaron mientras la caravana del presidente atravesaba la Plaza Dealey, en el centro de Dallas. Kennedy fue trasladado de urgencia al Parkland Memorial Hospital, donde murió poco después.
Le sucedió el vicepresidente Theodore Roosevelt. Leon F. Czolgosz, un desempleado de 28 años residente de Detroit, admitió haber disparado. Czolgosz fue declarado culpable en un juicio y condenado a muerte en la silla eléctrica el 29 de octubre de 1901.
Franklyn Delano Roosevelt, presidente electo en ese momento, acababa de pronunciar un discurso en Miami desde la parte trasera de un coche abierto cuando sonaron disparos. Roosevelt no resultó herido en el incidente de febrero de 1933 en el que sí murió el alcalde de Chicago, Anton Cermak.
HARRY TRUMAN se alojaba en Blair House, al otro lado de la calle frente a la Casa Blanca, en noviembre de 1950, cuando dos hombres armados irrumpieron en la casa. Truman no resultó herido, pero un policía de la Casa Blanca y uno de los atacantes murieron en un intercambio de disparos. Otros dos policías de la Casa Blanca resultaron heridos.
GERALD FORD sufrió dos intentos de asesinato en un lapso de pocas semanas en 1975 y no resultó herido en ninguno de los dos.
En el primer intento, Ford se dirigía a una reunión con el gobernador de California en Sacramento cuando Lynette “Squeaky” Fromme, discípula de Charles Manson, se abrió paso entre una multitud en la calle, sacó una pistola semiautomática y apuntó a Ford. El arma no se disparó.
Diecisiete días después, otra mujer, Sara Jane Moore, encaró a Ford a la salida de un hotel de San Francisco. Moore hizo un disparo y falló. Un transeúnte la agarró del brazo cuando intentaba efectuar un segundo disparo.
RONALD REAGAN salía de un discurso en Washington D.C. y se dirigía a su caravana cuando fue tiroteado por John Hinckley Jr., que se encontraba entre la multitud. Reagan se recuperó del ataque de marzo de 1981. Otras tres personas resultaron heridas, entre ellas su secretario de prensa, James Brady, que quedó parcialmente paralizado.
GEORGE W. BUSH asistía a un mitin en Tiflis en 2005 con el presidente georgiano Mijail Saakashvili cuando le lanzaron una granada de mano. Ambos se encontraban detrás de una barrera antibalas cuando la granada, envuelta en tela, cayó a unos 30 metros de distancia.
THEODORE ROOSEVELT, candidato presidencial. El expresidente fue baleado en Milwaukee en 1912 mientras hacía campaña para volver a la Casa Blanca.
ROBERT F. KENNEDY, candidato presidencial. Kennedy aspiraba a la candidatura presidencial demócrata cuando fue asesinado en un hotel de Los Ángeles, momentos después de pronunciar su discurso de victoria por haber ganado las primarias de California en 1968.
Kennedy era senador por Nueva York y hermano del presidente John F. Kennedy, quien había sido asesinado cinco años antes.GEORGE C. WALLACE, candidato presidencial. Aspiraba a la candidatura presidencial demócrata cuando recibió un disparo durante una parada de campaña en Maryland en 1972, incidente que lo dejó paralizado de la cintura para abajo.
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